Wilfredo Medina Peredo es un usufructuario de tierra en el municipio de Artemisa, de la provincia del mismo nombre, el occidente de Cuba. Sus tierras tienen una superficie de 26.84 hectarias en la Finca ¨Portal¨. Hace más de 15 años está asociado a la Cooperativa de Créditos y Servicios Antonio Guiteras.
Wilfredo se caracteriza por ser un buen productor ya que sobrecumple los planes de producción. En el último trimestre del 2017 realizó varias fumigaciones con plaguicidas para proteger la cosecha de frijoles. Debido a esto se intoxicó y le salió una dermatitis producida por contacto con agentes químicos que le impide continuar trabajando mientras esté en ese estado. Aparejado a la afectación de la salud va también la económica, ya que la seguridad social no le garantiza sustento y la Cooperativa no paga certificados médicos. Adicionando las pérdidas por desatender las tierras.
A pesar de los reclamos hace más de 6 meses que no le dan guantes, sombrero, botas y ropa de trabajo. Sin mencionar el sueño de poder contar algún día con medios de protección para las vías respiratoria, por lo que está trabajando sin ningún tipo de protección.
Sin embargo, en las clausulas del contrato que tiene firmado Wilfredo con la Cooperativa está bien definido de quién es la responsabilidad de garantizar los medios de protección al trabajador, con independencia a que el Código de Trabajo de la república de Cuba, Ley 116, lo establece como obligación de la administración.
Esta realidad la viven constantemente los campesinos cubanos y se quedan sin ningún tipo de defensa pues las reclamaciones tienen que ir dirigidas al que incumple y la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) no representa en nada los intereses y reclamos de los productores de la tierra.