Demasiadas son las dificultades que enfrenta una persona cuando decide realizar un Trabajo por Cuenta Propia, desde comprar la planilla para hacer la solicitud de la patente, las extensas colas en las oficinas de las Direcciones de Trabajo Municipales y la demora en la Oficina Nacional de Administración Tributara, Onat, para entregar los documentos que responden a la política tributara.
Entre una y tres semanas duras hacer la gestión, solo en la Dirección de Trabajo Municipal, cuando tienen problemas con el sistema informatizado de comunicaciones, es indefinido el tiempo.
Por otra parte, el ciudadano con interés de auto emplearse debe esperar hasta tres meses para hacer el proceso completo y comenzar a trabajar. En el derecho comparado, no debe existir parangón con la realidad cubana.
La falta de un sistema de comunicación seguro, la carencia de especialistas para atender a la población y un horario de trabajo insuficiente, además de las pésimas condiciones ambientales y de medios materiales de los inmuebles sedes de estas oficinas reguladoras, están entre los motivos de la demora.
En consecuencia, muchas son las personas que desisten de comenzar o dejan de ir a hacer las gestiones, esto provoca que luego de seis meses los funcionarios de la Onat se presentan en la vivienda del interesado con una deuda que es obligatoria pagar, aunque la culpa de la demora sea de las instituciones del Estado.
Definitivamente, un sistema tan bizarro como el cubano está diseñado para afectar el desarrollo de la forma de propiedad, eufemísticamente llamada, no estatales. Cuba esta en crisis estructural. La ciudadanía vive en esta cuasi carencial y con el modelo económico cubano, la prosperidad nunca llegará.