Villa Clara. El campesino Abilio Santiesteban es un productor asociado a la Cooperativa de Crédito y Servicios Orlando Silverio Núñez, del municipio de Corralillo, con la cual contrata la producción y comercialización de arroz, calabaza, plátano y melón que cultiva en 2,5 caballerías de tierra entre privadas y arrendadas.
Desde hace más de 10 años Silverio acostumbra regalar un saco de arroz pulido a una amiga de Placetas. En un punto de control de carretera la policía detuvo el vehículo particular y pidió documentos. La mujer explicó en vano porque las autoridades no demoraron en incautar el saco del grano.
Ese hecho no trascendió el marco de las relaciones de amistad entre dos familias. Pero cual no sería el asombro de todos, incluso a nivel de vecindario, cuando al otro día se personó la policía en la vivienda del campesino Silverio. Revisaron la casa, contaron cada libra de los productos cosechados y la reserva de alimentos familiar para el año, que se sabe duro.
Dirigidos por la policía, los jefes de la cooperativa hicieron un estimado del consumo de la familia (equivalente a 35 libras mensuales) y el excedente se lo llevaron. Dijeron que era mucha cantidad y se llevaron 5 sacos de arroz pulido. Y punto.