El 1ro de mayo suele ser un día de celebración y de reclamos para los trabajadores y las trabajadoras de muchas partes del mundo. Y no cabe dudas de que las conquistas sociales de los obreros constituyen pilares de la estabilidad de las democracias contemporáneas.
Los medios de comunicación estatales cubanos, como parte de la propaganda política oficial, reproducen la matriz informativa de que entre el Estado y los trabajadores existe una “alianza fuerte e indestructible”.
Retórica falaz. Justamente al día siguiente de la fusta de los trabajadores, el economista Julio César Fariñas Pérez, recibe toda la documentación laboral luego de que tiempo antes fuera convocado al despacho del Rector Dr. Andes Castro Algría, de la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas (UCLV), ubicada en la ciudad de Santa Clara, (a 300 km al este de La Habana) donde trabajaba hacia tres años con excelentes resultados y, en presencia del Vice Rector de Investigación y Postgrado y de la Decana de la Facultad de Ciencias Económicas, respetivamente, se le notificó al joven profesor de economía su separación, entiéndase expulsión, de la universidad y de la Educación Superior cubana por “mantener vínculos con organizaciones contrarrevolucionarias”.
El delito cometido por el ahora desempleado Fariñas fue pensar e intentar actuar diferente. Y eso en Cuba resulta peligroso para el Régimen. Por eso fue expulsado y se encuentra en total indefensión frente al actuar prepotente e intolerante de los ideólogos y guardianes del sistema con ropaje de académicos. Nada de pensamiento crítico se tolera en las instituciones sociales que debían ser centro de luces y del librepensamiento.
Por tanto, nada de celebración y mucho menos de posibilidad de reclamo de derechos para el joven docente ante una decisión institucional arbitraria que solo evidencia el cumplimiento del macro objetivo estratégico de la universidad socialista cubana: “Alcanzar niveles superiores en la labor educativa y política ideológica conducentes a un mayor compromiso con la Revolución y un cumplimiento cabal de la misión asignada a la comunidad universitaria a través de acciones de enfrentamiento a la subversión enemiga”.
Para cumplir tamaño objetivo a este joven le fue vulnerado el derecho económico a tener un empleo digno en correspondencia con su calificación y se le criminaliza por su derecho a pensar por sí mismo.