GRANMA, Marzo de 2020.- La localidad conocida como Vado del Yeso, en el municipio de Río Cauto, entró en cuarentena total tras confirmase el primer caso de COVID-19. La paciente, ciudadana cubana, entró al país y dos días después comenzó con los síntomas respiratorios agudos, razón por la cual las autoridades sanitarias locales cerraron todos los negocios tanto estatales como particulares.
La orientación para los 2835 habitantes de este pueblo fue permanecer en casa, en cuarentena, salir solo de ser imprescindible y recibir a los estudiantes de medicina en función de pesquisa en esta localidad del oriente del País.
La mayoría de la población está sumida en un gran descontento, no por la emergencia sanitaria sino por la escasez de productos tanto alimenticios como de aseo personal. Cada vez que los lugareños se ven obligados a salir la calle a proveerse de escasos víveres obtenidos a través del trueque son requeridos por las autoridades administrativas o la policía.
Las autoridades sanitarias no cuentan con mascarillas para repartir a la población, una de los requisitos obligatorios para la reapertura de los negocios privados que prestan servicios directos a la población.