De abusivo se pudiera catalogar el actuar de los funcionarios e inspectores de la Dirección Integral de Supervisión Provincial de Matanzas, Cuba. La zona de acción escogida el fin de semana fue el reparto Armando Mestre, de la propia ciudad de Matanzas.
Acompañados de agentes de la policía, la Presidenta del Consejo Popular y otras representante de organizaciones políticas y de masas, fueron visitando a varios de los muchos Trabajadores por Cuenta Propia con que cuenta el reparto.
Frente al cine Arcoíris multaron a dos vendedores de productos agropecuarios por no cumplir con los precios topados establecidos por el Gobierno en el contexto de la Tarea Ordenamiento Monetario.
En varios puntos de venta de productos alimenticios de la calle 115 se aplicaron multas igualmente por el tema de los precios y por no poner en la tablilla algunos productos que estaban a la venta.
Al reparador de cocinas de gas lo multan por no tener una tablilla donde se especifiquen los precios de los trabajos que realiza. A dos carpinteros (de los 3 que hay en el reparto) los multan por no poder demostrar la procedencia lícita de los insumos que utilizan para realizar los trabajos. Entiéndase lija, clavos, rejillas y junquillos, barniz, etc. (estos carpinteros sólo realizan actividades de restauración de bienes muebles, NO fabrican nada porque no tienen madera).
Con excepción de las personas relacionadas con los puntos de venta de alimentos, todos los multados son Trabajadores por Cuenta Propia de avanzada edad, jubilados que se ven obligados, por la carestía de la vida, a realizar alguna actividad económica que les aporte dividendos ya que sus miserables pensiones no les alcanza para terminar el mes.