La ausencia de múltiples productos alimenticios básicos continúa primando en el mercado estatal cubano. Comenzando por la leche en polvo, arroz y azúcar, ahora se suma también a la larga lista, el frijol.
Desde hace algunos, meses la distribución oportuna de frijol negro a través de la canasta familiar normada se vio afectada a causa del atraso en la entrega varios productos racionalizados, y debido a afectaciones en casi todo el territorio nacional, según informaron medios oficiales.
En este sentido, el precio del demandado producto en los puntos de venta no estatales ha aumentado aceleradamente en poco tiempo, llegando a alcanzar el elevado valor de 350.00 pesos por un pequeño paquetico de “negros” o “colorados”, lo que equivale a una libra apenas de dicho alimento.
Históricamente, el frijol (desde su versátil elaboración y presentación) ha constituido uno de los platos típicos principales de la dieta cotidiana del cubano, sin embargo, en las circunstancias actuales su precio resulta excesivo para gran parte de la población, la cual no cuenta además con acceso a otro tipos de granos como pudieran ser los garbanzos o lentejas, comercializados únicamente en las tiendas en M.L.C.
Continúa limitándose de esta forma y cada vez más, la posibilidad de que el cubano pueda aspirar a una dieta mínima y elemental en lo que respecta a granos; porque en relación a otros productos imprescindibles dentro de la pirámide nutricional, se ha perdido desde hace mucho toda esperanza.