No amigo(a) lector(a), no se preocupe si no encuentra esta palabra en el diccionario. Trucología, es el término que utiliza el mensajero (encargado de comprar los productos normados en Cuba a cambio de un pago) para denominar las trampas que hacen en las bodegas y casillas pertenecientes a la red de venta de productos normados por la Libreta de Abastecimiento, es un truco psicológico.
Para el control de esta Libreta de Abastecimiento se creo la Oficoda: Oficina de Control para la Distribución de los Abastecimientos; Es la entidad administrativa encargada a nivel municipal de todo lo concerniente al trámite de documentos que conlleva todo movimiento para incorporar, dar de baja en el Registro de Consumidores. Controla este registro para garantizar la canasta básica de productos normados. Desde julio del 1963 se creo ¨para proteger los intereses de la población consumidora, es una garantía de alimentos básicos¨
Llamada a desaparecer desde el 2011 por lo insostenible que resulta para el Estado, ahí está todavía 7 años después la Libreta.
A una persona enferma, con una dieta médica de leche asignada le corresponde recibir una bolsa de un litro cada tercer día. Si la leche te corresponde el primer día del mes y este tiene 31 días, no te dan la de ese día 31, por lo que recibes solo 10 bolsas de 11 que te correspondían. Así ocurre con el mes de febrero y sus 28 días. No entregaron la leche de dieta correspondiente al día 28. Es una técnica de marear a los ciudadanos, (palabras textuales del mensajero). Sin embargo no es difícil ver como venden las bolsas de leche a 5 pesos en moneda nacional a personas seleccionadas. La bolsa de leche normada tiene un precio de 25 centavos.
Algo similar ocurre con el yogur asignado a los niños de 7 a 13 años de edad. De entrada el producto vence a las 2 horas de recibido en el punto de venta y nunca tiene hora fija de llegada por lo que es muy difícil para los padres que trabajan adquirirlo. El precio de venta es a un peso en moneda nacional la bolsa de un litro, pero después de pasadas las 2 horas se vende por la libre a 3 pesos.
Adicionando a todo lo anterior referido a la leche y el yogur, que los carreros que distribuyen el producto dejan bolsas de más para la venta con las ganancias ¨al serrucho¨ (mitad y mitad)
La misma suerte corres con los productos cárnicos asignados en dieta médica por enfermedad. La carne y el pescado nunca los traen completo, entonces tienes que esperar una segunda y hasta tercera vuelta, si no lo pierdes, para poder adquirir un producto que es una necesidad para tu salud, prescrito por un facultativo. En el caso de los cárnicos para todos sucede igual, no viene nunca completo y luego se vence porque no tienen equipos de refrigeración. El picadillo que vale 30 centavos lo venden a 10 pesos, y lo más triste, lo venden a criadores de perros de pelea.
Es una mafia institucionalizada lo que hay, un gran negocio extremadamente lucrativo.